De
esa agua quiero beber Por
Helena G. Méndez Medina
En
estos tiempos que vivimos, infancia del siglo XXI, nos
preocupa que el gobierno, la iglesia, o cualquier otra
institución nos programen, nos modifiquen, nos mediquen
nuestro comportamiento. La época feudal hace siglos que
quedó atrás, para la mayoría de los pueblos. En
Puerto Rico tenemos una institución, una compañía
transnacional, proveedora del servicio, que considero el
más básico de todos: el suministro de agua.
En
estos tiempos que vivimos, infancia del siglo XXI, nos
preocupa que el gobierno, la iglesia, o cualquier otra
institución nos programen, nos modifiquen, nos mediquen
nuestro comportamiento. La época feudal hace siglos que
quedó atrás, para la mayoría de los pueblos. En
Puerto Rico tenemos una institución, una compañía
transnacional, proveedora del servicio, que considero el
más básico de todos: el suministro de agua. Esta compañía
ha asumido el rol de paterfamilia en nuestra comunidad.
Nos controla nuestros patrones de interacción personal,
el orden que establecemos en nuestros espacios (casa,
trabajo, etc.) nuestras rutinas básicas de socialización,
entre muchas otras más. Veamos:
I.
Tareas Compartidas
lavar
platos: regla aprendida desde siempre Uno no se
acuesta hasta que no lave los platos. Eso trae
sabandijas, etc. Ahora no solamente dejamos los
platos sin lavar (Ay, esos calderos, esas salsas de
espaguetis,...) si no que hemos establecido una
nueva relación comercial; el fumigador.
lavar
ropa: esa actividad no tiene nada que ver con la
necesidad de lavar ropa y una programación
inteligente de tareas compartidas. Ahora esta tarea
se activa CUANDO VIENE EL AGUA (que son las dos de
la mañana, pues nada, vino el agua). Pero no crean
que basta con pulsar el ciclo y ya, NO, tiene que
estar despierta la persona para cerciorarse de que
hasta que el ciclo de enjuague no haya terminado no
debe apartarse de su máquina. Ya circulan historias
de una epidemia de lavadoras que se les quemó el
motor. Cuando termina ese ciclo es ese el momento de
retirarse a dormir para luego levantarse en tres
horas más y enfrascarse a la vida del tapón-trabajo-tapón.
mapear:
tarea que requiere menos agua y en caso extremo dos
galones de agua del río o del supermercado nos la
puede proveer. (Ay, abuela te entiendo.)
limpieza
de superficies horizontales: véase la anterior
II.
Cosas del cuerpo
baño:
Ah, esa rica sensación de saber que pronto te
despojarás de tu ropa, abrirás el grifo de la bañera
y antes, mucho antes de que se derrame por tu cuerpo
esos refrescantes hilos llamado agua, ya gozas. Pues
nada, llegas a tu casa, te quitas la ropa, te metes
en la ducha, abres el grifo y NADA. Buscas uan
toalla, vas a la cocina y tomas un galón de agua
destinado para beber y comienzas nuevamente el
ritual. También puedes esperar a ver si llega el
agua. Si optas por esta salida entonces puede ser
que prepares la cena, te sientas a consumirla, hablés
por teléfono, leas, veas la tele sintiendo el
cuerpo sucio. Ah, pero puede ser que llegue el agua
y en medio de una conversación o programa
televisivo tengas que dejar todo para bañarte.
Entre esténtores y quebrantos de agua te darás el
baño. La nostalgia te estremece. Te acuerdas de
aquellos baños donde podías estar minutos sin la
remota preocupación de que te ibas a quedar
enjabonada.
descargar
el inodoro: Otra tarea frustrada que ha estimulado
el comercio de los aereosoles perfumados. Ah, si hay
de todo en esta economía.
beber
agua: derecho básico, en un planeta cubierto de
agua en su mayoría y ciudadanos de un archipiélago
conocido por su verdor gracias a las continuas
lluvias que recibimos. Pues no, no sólo el agua no
existe durante la mayor parte de la semana, si no
que su cualidad no es potable. NO somos piscina para
que el agua que salga por el grifo sea blanca y
huela a cloro. Poseemos un cuerpo humano, por lo
tanto no procesamos bien los metales pesados.
Lo
peor de todo, lo peor es que poco a poco la gente
tiende a establecer rutinas que acomodan, aceptan
esta situación insostenible. No pretendo redactar
una lista de como nos afecta la carencia y la
calidad de agua en nuestras vidas físicas y fisiológicas
ni tampoco, del por qué los de áreas ricas tienen
el agua para mantener "saludable" la grama
de sus campos de golf mientras la clase trabajadora
no tiene ni para beber. Pero sé que Uds. podrían añadir
muchas más y les sugiero que lo hagan. Simplemente
intento dejar saber que el mal servicio que
recibimos tiene muchas raíces.
La
raíz principal es el mal manejo de nuestras fuentes
de agua por la administración de ONDEO y es porque
no hay un compromiso con nuestra calidad de vida de
pueblo. Ellos al cabo de unos años se irán con los
bolsillos repletos dejando una infraestructura no
funcional y un pueblo sediento. En segundo lugar,
pero diría paralelo a ONDEO es el gobierno del
presente, del pasado y del futuros. Pues por lo que
oigo ya parece que también van por el mismo camino.
La responsabilidad en particular recae en esas
administraciones de gobierno que siguen otorgando
permisos sin cerciorarse que la infraestructura no
aguanta MAS y que otra urbanización, o campo de
golf implica que los sectores más alejados NO tendrán
agua por más tiempo del que nunca tienen.
Ya
están las campañas electorales por doquier, ya
comienzan nuestros árboles a sufrir el embate de
los clavos que sostienen caras de futuros
mandatarios. Prometerán y nos jurarán este
cuatrienio que tendremos agua. Pero ya llevan años
prometiendo lo mismo, ¿será que creen que nos
pueden engañar nuevamente? ¿Qué Ud. opina?